"La digestión"

Una de las bases técnicas de entrenadores y técnicos para la alimentación práctica a base de proteína alta ha sido garantizar los valores sanguíneos, esencialmente considerados valor hematocrito y hemoglobina sérica. Se da por sentado que el estrés al que están sometidos los perros de esfuerzo va asociado a una progresiva anemia que debe ser corregida y limitada por dietas elevadas en proteína. El concepto de nivel proteico optimo asociado a la nutrición trae aparejada la necesidad de elevar también los niveles de energía digestible y pone en liza el concepto de proteína de calidad, o sea la proteína de máxima absorción en el tramo proximal del intestino. El estrés debido al ejercicio provoca una mayor secreción de serotonina encefálica. Este neurotransmisor participa en la regulación de diferentes funciones vitales, sueño, presión sanguinea, ingesta... El precursor de la serotonina es el triptófano. El ejercicio aumenta la movilización del triptófano y su llegada al cerebro a través de aminoácidos de tipo neutro (valina, eucina, metionina...)que actúan como transportadores regulables. El perro responde al ejecicio con mayor demanda de aminoácidos y de triptófano, por tanto pide a su organismo un abastecimiento rápido de proteína de calidad.

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